Esa es la frase que debe pensar Allegri, entrenador del AC Milan, cada vez que el equipo pierde un partido y ya lleva tres seguidos, haciendo un total de cinco derrotas y un empate en ocho partidos en la Serie A más una derrota y un empate en tres partidos de Champions League.
Después de cada partido perdido por el equipo, en los periódicos italianos leo la misma frase: "El partido contra XXX del próximo domingo será decisivo para Allegri"; el AC Milan pierde y aquí no ha pasado nada.
¿Por qué?
Quizá podría ser porque Galliani decidió renovar a Allegri hasta 2014 cuando se consiguió el Scudetto 2010/2011 y es consciente de que si le despidiera ahora, tendría que pagarle una suculenta indemnización... y sería ilógico haber vendido a casi todas las superestrellas del equipo en verano para sanear las cuentas y ahora tener que hacer un desembolso tan grande sólo para echar al entrenador.
¿Queréis leer algunos datos curiosos?
- La temporada pasada el AC Milan sufrió seis derrotas en la Serie A y en menos de una quinta parte de esta temporada ya lleva cosechadas cinco.
- En la 2011/2012 sólo perdió dos partidos como local y este año lleva tres.
- La temporada pasada, el menor aforo en Champions League rondó los 64.000 espectadores; en el único partido de este año sólo han ido 27.600.
- La última temporada, el aforo medio en liga oscilaba entre los 40.000 y los 50.000 espectadores, con un mínimo cercano a los 35.000~37.000; en esta temporada no llega a superar los 35.000 de media y contra el Cagliari sólo acudieron 28.000 personas.
Cuando estaba pensando en escribir este artículo (desde hace varias semanas), pensaba concluirlo con algo así como que al final salvaríamos la temporada metiéndonos en la Europa League o la repesca de la Champions debido al bajo nivel del resto de equipos y que con un par de victorias nos meteríamos sin problemas en el grupo de cabeza, pero cual ha sido mi sorpresa cuando he mirado la clasificación y he visto que el AC Milan se encuentra en la ¡15ª posición! a 15 puntos del líder (Juventus), a 11 del tercer puesto (Lazio), a 7 de la quinta plaza (Roma) y empatado a puntos con el antepenúltimo clasificado (Pescara).
¿El mayor problema de todos?
Que esta situación no va a cambiar como los aficionados (cada vez menos) que van al estadio se levante en un clamor popular y la directiva no tenga más remedio que cambiar de entrenador, pero esa es la única alternativa porque en el mercado de invierno no va a llegar ningún fichaje de renombre que pueda subir el nivel del equipo.
¿Por qué Allegri no va a conseguir nada de provecho?
Porque está demostrando que este nivel le viene demasiado grande; en el partido contra el Zenit decidió cambiar a un sistema 4-2-3-1 y el equipo mostró la cara más ofensiva de la temporada, pero una derrota en el siguiente partido contra el Inter (por el fallo garrafal de Abbiati) le hizo recular a su clásico e inservible 4-3-1-2 con el que el equipo volvió a perder, rematando el colmo de los colmos con el 5-4-1 (aunque lo quieran disfrazar de 3-4-3 en la prensa) de ayer contra el Málaga en el que de repente aparecen en el once titular Acerbi y Constant, dos jugadores que apenas habían contado para el entrenador en los diez partidos anteriores.
Ya veremos lo que tengo que escribir en una semanas, espero que nada que lleve consigo la palabra "descenso" o "salvación".