lunes, 20 de febrero de 2012

El peligro de las nuevas tecnologías

No voy a hablar de los ya sabidos problemas que ha traído el uso de las nuevas tecnologías a los adolescentes (y a los nos tan jóvenes también), como puede ser la adicción, el chantaje, el robo de datos o el aislamiento del mundo real.

Los problemas a los que hago referencia son aquellos que pueden pasar desapercibidos pero que podrían ser más graves que los anteriormente citados: la confirmación y/o la perpetuidad de un hecho.

¿A qué me refiero?
Supongamos que decido no ir a clase porque prefiero irme al parque con mis amigos, pero al mismo tiempo tengo la "brillante" idea de twittear lo siguiente:

"Tomando el sol con mis colegas; ¡qué bien sienta perder de vista al cerdo de mates!"


¿Cómo pretendes negar lo que has hecho? Es más, si tus padres o tus profesores decidieran abrirse una cuenta de Twitter, ni te enterarías que están leyendo tus mensajes.
De una sola tacada has dado a conocer una "falta" y le has otorgado perpetuidad, puesto que aunque decidas borrar el mensaje es fácilmente recuperable por un informático experto (o si alguien ha visto ese mensaje, con sólo pulsar el botor "Impr Pant" tendrá una copia preciosa de tu metedura de pata).

Lo mismo ocurre con otros sistemas como Facebook o Tuenti, donde las mentes privilegiadas que algún día serán el futuro del mundo dejan constancia de sus desmadres y desvaríos... cuando el resto del mundo pensaba que estaban en casa estudiando o en la cama pasando una gripe tremenda.

¿Más peligros de estas tecnologías?
Los dichosos "detalles" de los mensajes, porque no es lo mismo que tu hij@ ponga un tweet a las 20:00 cuando está en su cuarto que si lo escribe a las dos de la madrugada, que debería estar durmiendo, o a las 12:00 que en "teoría" está en clase.

Y lo mismo ocurre con los "indignados", que no son los mismo que los del 15-M, sino que son aquellos que todo el mundo conoce sus aficiones pero que se mueren de la indignación si alguien osa decírselo; por ejemplo, los que salen 4 días a la semana y después dicen que se matan a estudiar pero que suspenden porque el profesor les tiene manía, o los que beben como esponjas pero los problemas del riñón le vienen por comer verdura...

Lo que quiero decir es que uno no se puede creer al que le dice que se está dejando los cuernos estudiando y a todas horas del día te llegan tweets con frases como "tomando el sol", "comiendo un helado", "tumbad@ en el césped"... o día sí y día también sube cientos de fotos al Facebook de la fiesta del sábado, en la bolera el jueves, en el parque el martes...