Mucha gente podría pensar que el enfrentamiento del que hablo es un Real Madrid vs Barcelona, ya sea de baloncesto o fútbol, pero no; ni siquiera un duelo con tanta tensión y emoción iguala al encuentro del que yo hablo.
Alguien podría pensar que me estoy refiriendo a un Inter de Milán vs Milan, el único derbi de todo el viejo continente que enfrenta a dos equipos campeones de alguna Copa de Europa que comparten ciudad; pero tampoco es ese.
Otras persona, más aficionadas al deporte de la canasta, podrían pensar que hago alusión al gran partido entre Boston Celtics vs Los Ángeles Lakers, mítico partido de baloncesto que ha vivido duelos como Larry Bird-Magic Johnson, Paul Pierce-Kobe Bryant o Kevin Garnett-Pau Gasol; pero tampoco es este encuentro.
Quizá alguien se vaya al otro lado del charco para pensar que me refiero a los clásicos del fútbol sudamericano entre River Plate y Boca Juniors, entre Sao Paulo y Flamengo o incluso el más clásico de los clásicos: Argentina vs Brasil; pero ni de cerca se aproximan.
Alguien podría pensar que me estoy refiriendo al duelo por excelencia en el rugby entre Australia y Nueva Zelanda, o quizá entre Inglaterra y cualquiera de los equipos británicos que le acompañan en el Seis Naciones, pero eso todavía está más lejos de la realidad.
En mi opinión creo que el enfrentamiento al que hago referencia se podría calificar del encuentro entre el Cielo y la Tierra, entre el Infierno y el Paraíso, un duelo con los Jinetes del Apocalipsis, los guerreros de la batalla de las Termópilas (película de "300") y todos los personajes de la saga El señor de los anillos, incluyendo a los que nacen de un hoyo en el suelo.
Porque no es sólo el encuentro directo que se producirá sino que además el equipo contrario es la leyenda hecha realidad de partidos broncos, duros, llenos de protestas, triquiñuelas y marrullerías con el único final de conseguir la victoria.
Así que todos aquellos que queráis asistir a una batalla tan épica que dejará la película de "Avatar" por los suelos, os cito este sábado día 27 de febrero de 2010 a las 10:00 de la mañana en un colegio (de cuyo nombre no quiero acordarme) en la calle Juan Pérez Zúñiga, 37.
Las cartas están sobre la mesa, la suerte está echada; si parpadeas, te lo pierdes.
Si la lluvia no lo impide, claro está.
P.D: A pesar de tener una agenda muy apretada entre los estudios, los partidos del colegio, el rugby, el baloncesto, la selección... no estaría de más, "Jordan", que te interesaras un poquito por las agendas del resto; desde el lunes hemos estado compichados para no decirte nada pero ni siquiera has preguntado.
Espero que no haya ningún incidente cuando vuelvas de entrenar... más que nada porque lo puedo hacer constar en acta. Advertida quedas.
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graciosillo, si vosotros os compincháis para que YO no me entere, creéis que sois los más listos? pensáis que no lo sabía? cuando piensas que vas a saborear una victoria te darás cuenta que TU RIVAL hace tiempo que está celebrando el triunfo.
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